Internet se ha convertido en una herramienta útil para nuestros adolescentes pero no está exenta de riesgos, siendo uno de ellos la exposición involuntaria (EI) a material sexual con las consecuencias que dicha exposición puede tener en su desarrollo psicosexual. Nuestros resultados indican que la EI a cibersexo es alta (85,9%) en menores de entre 13 y 17 años, mientras que la media de la primera exposición se sitúa en torno a los 12 años. Entre las principales consecuencias tras la EI destacarían los síntomas de evitación/embotamiento emocional (51,4%), síntomas sexuales (44,7%) y aumento de activación fisiológica (39,4%). En menor medida, síntomas de reexperimentación del suceso (29,4%). Estos hallazgos evidencian las consecuencias negativas de la exposición involutaria y la necesidad de educar sexualmente a nuestros adolescentes para minimizar el impacto negativo de la EI a material sexual.
Para más información sobre este estudio: https://bit.ly/2XAlHw6